
por Provincia 23
Por lo menos queremos que la distribución de recursos entre las ciudades se realice de manera equitativa”, dijo, a partir de los recursos multimillonarios que se destinaron a Ushuaia. También se metió en el debate sobre OSEF y expuso problemas de gestión que deben resolverse, porque los aportantes han aumentado “considerablemente en estos últimos años con tantos ingresos en el Estado provincial”. De su futuro político señaló que, más allá de los nombres, están confluyendo distintos sectores del ámbito público y privado, pensando en “una provincia mejor”.
Río Grande. – El intendente Martín Pérez concedió una extensa entrevista a FM Origen en la que abordó los desafíos por delante, fundamentalmente sostener los servicios municipales y la obra pública con recursos propios y sin ayuda del gobierno provincial por el momento. También se metió en el debate sobre OSEF y consideró que hay problemas de gestión más allá de la falta de recursos, y cuestionó que con 15 dispositivos de salud municipal no se haya podido cerrar un convenio todavía entre la obra social y el municipio. Hubo críticas al gobierno por la falta de equidad en el aporte de recursos extraordinarios a las ciudades.
En principio el intendente riograndense hizo referencia a la violencia verbal que se ve en el discurso nacional. “Está todo exacerbado, se ha instalado el discurso del odio y viene de arriba hacia abajo. Eso es muy preocupante porque antes había algunos nichos donde se expresaba esa posición de odio, pero hoy el problema lo estamos teniendo en la Argentina y en el mundo entero, y el discurso del odio prolifera de arriba hacia abajo. Las redes sociales, con la falta de reglas claras, son un lugar más proclive para que el discurso del odio prolifere y algunos sectores de la provincia lo aprovechan para potenciar ese tipo de discurso. Ha proliferado lo peor de las redes sociales”, dijo.
“La expresión máxima es lo que ha sucedido en Argentina, que ya sucedió con Bolsonaro y con Trump, y ahí hay un tema para trabajar, sobre todo para las nuevas generaciones. Es parte de un fenómeno social y la política es una expresión del fenómeno social. Hoy puede llegar a garpar más la lógica de ser agresivo en redes sociales y decir cualquier barbaridad, pero no me parece el camino, aun a costa de tener menos votos”, manifestó.
“Hay una lógica de ser disruptivo para que la gente levante la cabeza y vea, pero yo no creo en eso. Cuando estamos en un lugar de responsabilidad tenemos que ser disruptivos con lo que hacemos, con la manera en que se trabaja. Nosotros somos disruptivos en Río Grande tratando de hacer la mejor gestión posible y de transformar la ciudad. Se han hecho muchas cosas y hay una política de Estado que se sostiene, a pesar de todo el discurso oficial que lleva a hacerle creer a la gente que el Estado es un problema. Yo no creo eso y tenemos la responsabilidad de construir un Estado más eficiente, menos dimensionado y más efectivo para brindar los servicios”, subrayó.
“Nosotros tenemos 15 dispositivos de salud en Río Grande y, desde que asumió el gobierno de Milei, no solamente no cerramos ninguno, sino que creamos nuevos. El último es un centro de tratamiento para personas con problemas de adicciones. Desde el inicio del 2024 tuvimos la decisión del gobierno nacional de cortar toda la obra pública y fue una de las peores decisiones que ha tomado este gobierno. Esas son obras que hace el Estado, porque no las hace el sector privado. Nosotros tratamos de continuar las obras prioritarias. Hace unos días llegó parte del equipamiento de la nueva pileta olímpica que vamos a tener e hicimos una inversión de más de mil millones de pesos enteramente con fondos municipales. La pileta la vamos a terminar nosotros, pero era una obra financiada por nación”, recordó.
“Por otro lado tuvimos el recorte de todos los programas sociales, entre ellos el de salud sexual reproductiva y ahora los jóvenes no pueden acceder a los anticonceptivos. Los municipios tenemos que sostener el transporte público y seguir subsidiando el boleto, porque es una necesidad de nuestra gente. El boleto de colectivo hoy debería salir 2.500 pesos y no llega a 800. Todos los días nos preguntamos hasta cuándo vamos a poder sostener esto. Ha caído la actividad privada y es un país sin actividad, sin desarrollo, sin obra pública. Yo veo un país que no va a poder crecer y resolver las necesidades que se tienen”, avizoró.
La necesidad social se refleja en la demanda alimentaria. “Estamos asistiendo a 70 comedores y merenderos en Río Grande y no les hemos cortado la ayuda. Obviamente hacemos los controles que corresponden porque también hay mucho vivo. Por un vivo, financiado muchas veces por la política, no podemos hacer que paguen los otros 70 comedores que trabajan bien”, expresó.
“Uno no es obtuso y no puede decir que antes estaba todo bien y ahora está todo mal. Hay un grupo reducido de la sociedad que puede acceder, pero a nosotros nos ha crecido la necesidad exponencialmente, también la demanda de trabajo, y eso significa que la actividad económica no está teniendo dinamismo”, manifestó.
En otro tramo destacó la aparición pública del CEO de Mirgor, José Luis Alonso, para hacer una encendida defensa del subrégimen industrial y de la necesidad de hacer soberanía “estando” en el territorio. “Tenemos un vínculo permanente por las necesidades que tiene la empresa, como lo tenemos con otros empresarios. José Alonso es una persona que conoce muy bien la promoción industrial de Tierra del Fuego y por suerte ha incorporado algunas líneas discursivas que hemos machacado permanentemente y me parece positivo. Ha incorporado la línea de discurso de la soberanía y es algo que no se escuchaba de los empresarios. Es importante porque, si no hubiese 19640 no queda nadie en Tierra del Fuego”, advirtió.
“Es importante que se pueda dar una discusión más profunda desde el sector privado, porque hay sectores que vienen financiando la crítica a Tierra del Fuego. Lo que yo les pido siempre es que inviertan más en Río Grande. Yo celebro que hagan hoteles en Ushuaia, pero los recursos salen de Río Grande y los trabajadores están acá. Río Grande pone todo para que la industria crezca y ahí tenemos que cambiar. Obviamente el puerto es clave porque hay que mejorar la logística y hay que mejorar la condición energética de nuestra provincia. Por eso pensamos el FAMP, para que las empresas nos ayuden en el desarrollo”, remarcó.
Consultado sobre el debate que se está dando en la Legislatura para buscar una salida a la obra social estatal, consideró que debe haber “menos reunionismo” y una mejor administración. “Lo veo con mucha preocupación. La gente nos pide ayuda, no distingue entre un gobernador y un intendente, y hay que resolver los problemas. Nosotros estamos haciendo gestión en salud hace cinco años y medio y no logramos todavía que OSEF firme un convenio con el municipio, cuando el 20% de las atenciones que hacemos son a afiliados de OSEF”, criticó.
“No puede ser que se administre tan mal, porque no solamente el problema son los recursos. Me parece bárbaro que se discuta en la Legislatura, pero hay que encontrar una solución definitiva. Nosotros estamos dispuestos a dialogar para poner en valor lo que hacemos en la salud, porque no es menor que Río Grande tenga 15 dispositivos de salud en funcionamiento”, sentenció.
“Tenemos cuatro centros de salud, el centro de rehabilitación, el laboratorio, el centro de las infancias, tenemos un banco ortopédico, prevención de adicciones en general, toda el área de salud mental, incorporamos telemedicina y cómo puede ser que eso no se pueda hacer desde una obra social que tiene miles de aportantes. Los aportantes han crecido considerablemente en estos últimos años con tantos ingresos en el Estado provincial. Hay que encontrar una solución, menos reunionismo y más decisión”, reclamó.
Para poner cifras concretas, indicó que “el año pasado invertimos 1.800 millones de pesos en el sistema de salud municipal, incluido los salarios de los 300 profesionales que tenemos y toda la infraestructura”.
Por otra parte, anunció la construcción de nuevas plazas en el próximo verano, que se van a sumar a los 157 espacios verdes de la ciudad. “Vamos a intervenir fuerte en varios espacios de la zona sur, vamos a comenzar el parque en la margen sur y ya hemos comprado los juegos. Hemos trabajado con algunas empresas privadas que me pidieron no dar nombres, pero nos han estado acompañando con inversión para poder contar con todo el mobiliario y los juegos que necesitan los nuevos espacios públicos de la ciudad”, anticipó.
Como desafío en lo que resta de su gestión dijo que pasa por “sostener un plan de obra pública municipal que se financia enteramente con recursos municipales. No recibimos un peso del gobierno nacional y este verano no hemos recibido un peso del gobierno de la provincia tampoco, para poder avanzar con obra pública”, reprochó el intendente.
“Es una pena porque yo en noviembre conversé con el gobernador, me preguntó cuáles eran las necesidades y lamentablemente la charla quedó ahí. Espero que podamos retomarla en algún momento y podamos avanzar para brindar soluciones a los vecinos de Río Grande. Por lo menos queremos que la distribución de recursos entre las ciudades se realice de manera equitativa. Hoy está a la vista que no está siendo equitativa”, enfatizó.
A propósito de la reacción del gobernador cuando le mandó una carta pidiendo equidad con Río Grande, dijo que “cuando uno manda una nota es porque agotó todas las instancias de diálogo previo. Hubo una charla personal en noviembre y después eso no avanzó, por eso presentamos una nota, pero tampoco avanzó la nota. Vamos a seguir insistiendo de buena manera para tratar de que la ciudad pueda tener el acompañamiento del Estado provincial como tiene Ushuaia, para llevar adelante obras de infraestructura”.
“¿Saben lo bien que nos hubiese venido a nosotros contar con cuatro mil millones de pesos en la ciudad para hacer obras? Por ejemplo, ya tendríamos terminado el natatorio, podríamos haber terminado el mercado de productos locales en el ex quiosco Fénix, podríamos haber hecho los accesos al barrio Los Cisnes y Vapor Amadeo. Ojalá podamos tener esos recursos hacia adelante. Nosotros vamos a ser muy serios y responsables para poner en valor las ayudas que recibimos”, se comprometió.
“Lo cierto es que hoy contamos con los recursos municipales y con eso tratamos de administrarlo de manera eficiente, ordenada, transparente, para seguir haciendo obras en la ciudad”, apuntó.
También fue consultado sobre la relación con los concejales. “Hemos mejorado mucho la relación institucional con el Concejo Deliberante. Nosotros hemos comprendido que teníamos muchas cosas que corregir y yo asumo la mayor parte de la responsabilidad. También la gran mayoría de los concejales ha comprendido que el diálogo es la mejor manera para resolver las necesidades que tiene nuestra gente. No es momento para que el Concejo y el Ejecutivo estén peleándose por dónde va una garita o no. Por suerte ha mejorado mucho el diálogo con todos los bloques, con la presidente tenemos una muy buena relación, también con el bloque de Somos Fueguinos, con Maxiliano Ybars, siempre en términos institucionales y respetando las posiciones de cada uno”, sostuvo.
“La gran mayoría del Concejo comprendió que el camino no es poner palos en la rueda al Ejecutivo y eso ayuda a la ciudad”, aseguró.
Respecto de su proyección política a futuro, reveló que ya están empezando a confluir distintos sectores, gremios, privados, sector público, “por una provincia mejor, más allá de los nombres propios. Tiene que ver con cómo hacemos para pensar los temas que necesita Tierra del Fuego en función del desarrollo y el crecimiento, cómo hacemos para pensar una Río Grande que se consolide del punto de vista del empleo, que hoy es el gran problema que tiene nuestra gente. No podemos seguir atados a las coyunturas nacionales, porque cuando las cosas se complican la primera golpeada es Tierra del Fuego y fundamentalmente Río Grande”.
“Uno de los desafíos que tenemos es el turismo y es una de las cosas sobre las que vengo hablando mucho con Daniel (Harrington), que logró recuperar las termas después de tantos años. Daniel tiene una mirada puesta en eso y yo creo que va a ser transformador de verdad para el turismo de Tierra del Fuego, sin ir en desmedro de nadie. Ushuaia va a seguir siendo la meca del turismo y sin dudas queremos que Ushuaia sea una ciudad que se distinga en el mundo, pero Tolhuin en este caso puede ser un centro de la mirada nacional e internacional, porque va a tener las termas del fin del mundo”, confió.
“Río Grande puede acoplarse a esto y ya estamos trabajando, pensando en el desarrollo de las termas y viendo de qué manera podemos potenciar nuestro turismo local”, concluyó el intendente.