
Cristina Fernández de Kirchner volvió a sacudir la escena política con un mensaje directo a Javier Milei en el que cuestionó duramente su política cambiaria y monetaria. “¡Ay Milei!… Qué quilombo se te armó… Y no te lo digo por la coima de tu hermana, sino por lo cambiario y monetario. ¡La vas a chocar mal!”, escribió en su cuenta de X, desatando una ola de repercusiones.
En un extenso posteo, la ex presidenta apuntó contra lo que describió como una “fuga de dólares por la canaleta del turismo emisivo, la formación de activos en el exterior, los intereses de la deuda, el colchón y las importaciones”. Además, ironizó sobre la falta de divisas: “Así estamos, economista experto en crecimiento con o sin dinero… sin pesos y sin dólares”.
Kirchner también cuestionó la estrategia del Gobierno respecto al manejo del Banco Central. Recordó la promesa de Milei de “quemar la entidad” y lo acusó de sostener el déficit con la emisión de títulos: “Entre la bola de nieve que venís armando con los intereses capitalizables y las tasas de interés bancario que subiste hasta la estratósfera, chau crédito bancario”.
El mensaje, cargado de sarcasmo y expresiones coloquiales, incluyó incluso referencias personales al presidente. “Ahora entiendo por qué no llegaste a ser arquero en primera: te tiran un colchón y no lo atajás. ¿Viste que como panelista en la tele es mucho más fácil que como presidente en la Rosada?”, lanzó la ex mandataria, en un tono que rápidamente se volvió tendencia en redes.
Más allá de las ironías, Cristina insistió en su planteo histórico sobre la economía bimonetaria y el endeudamiento externo. “Hace más de un año te dije (por escrito y en más de 30 páginas) que el verdadero problema de la economía argentina era su carácter bimonetario, agravada por un criminal endeudamiento en dólares”, subrayó.
El cierre de su mensaje también trajo un recuerdo de gestión: la ex presidenta mencionó que el próximo 11 de septiembre se cumplirán 16 años de la ley que eliminó el delito de calumnias e injurias para periodistas. “Imaginen si estuviera vigente hoy. ¡De nada, queridos amigos y amigas!”, concluyó, en lo que pareció un tiro por elevación tanto a la prensa como al propio gobierno.